La escuela tiene como una de sus funciones formar ciudadanos con sólidos valores éticos, haciendo de la democracia participativa una forma de vida que nos comprometa en la transformación individual y social.
La constitución de 1991 ha sentado las bases para construir una sociedad democrática y justa en la que se respete los derechos de todo ciudadano; pero también se exija el cumplimiento de sus deberes.
Nuestro manual de convivencia propone estrategias y normas para de común acuerdo regular y conciliar las relaciones entre los distintos miembros de la comunidad educativa, avanzando en la construcción de espacios democráticos que permitan el desarrollo de la autonomía y la formación integral de los alumnos.
Es entonces deber de todos, construir y vivenciar algunas normas que nos muestran otra manera diferente de vivir en la experiencia cotidiana. Nuestro manual de convivencia esta orientado a la formación integral de los estudiantes, al crecimiento personal de todos y al mejoramiento de la calidad de la educación en nuestra institución.
1/4/10
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